Es publicista, tiene 37 años y vive en el exterior hace más de diez. Algunos de sus comerciales son recordados por miles de argentinos y hasta trabajó codo a codo con un tal Lionel Messi. Sin embargo, para Bruno Acanfora el reconocimiento popular llegó por otro lado: la creación de memes “bosterizados”.
El fútbol no sabe de clases sociales ni de creencias. Tampoco sabe de fronteras. Bruno se fue del país en 2010, pero su fanatismo por Boca se fue con él. Pasó por Chicago, Nueva York, y actualmente reside en Los Ángeles, donde es Director creativo ejecutivo en la agencia de publicidad GUT.
Bruno se fue del país en 2010, pero su fanatismo por Boca se fue con él.
Además, es un muy activo usuario de Twitter, red social que dice encantarle. Durante el 2020 empezó a jugar con sus conocimientos de edición y diseño para armarse una buena carpeta de memes que estuvieran identificados con el Xeneize, para entonces publicarlos cuando la situación lo ameritaba.
“Cuando hay un partido, Twitter Argentina es muy divertido, la gente va comentando minuto a minuto, y el meme está ahí para usarse en esos momentos”, aseguró Acanfora a Diario Con Vos. Para acortar el proceso, en lugar de acondicionar un meme a la situación del partido que quería referenciar, decidió que todos los memes famosos tuvieran su versión de Boca: “Me puse a ver un ranking de los más famosos y empecé a hacerlo”, contó.
Jean-Leon Gerome, El Comerciante de trapos.
Si bien le encantaría saber si alguien del club vio sus memes bosteros, hasta ahora no tuvo interacciones por ese lado. Aunque se imagina que algunos de los jugadores actuales -principalmente los más jóvenes- deben haberse encontrado con un par de sus memes bosteros en algún momento.
“Los memes me parecen fabulosos, es algo de la cultura de internet que pasó a ser parte de la vida cotidiana. Me apasiona cómo una imagen puede explicar mucho más que las palabras. Si te muestro un meme, no es lo mismo que si te escribo ‘me quiero esconder abajo de la cama’. El meme te representa mucho más, es muy completo”, afirmó.
La bosterización del arte
Dentro de su universo de memes bosteros, Bruno empezó a meterse con otro tipo de imágenes mucho más complejas de intervenir: obras de arte clásicas o renacentistas. “Un día, para probar, hice una blasfemia total: un cuadro de Rafael donde Jesús asciende a los cielos. En su lugar puse el escudo de Boca y quedó la gente alrededor adorándolo”, contó.
Basado en el cuadro de Raffaello Sanzio La Transfiguración.
“La gente se ofende por todo, y más por religión, pero esto es algo para divertirnos todos, algo curioso e inusual. Y lo hago con mucho respeto: trato de no pintarlo así nomás. Intento que los colores tengan que ver con el cuadro, e idealmente, que la época coincida”, aseguró Bruno sobre la serie “Bocart”. “Me encanta el arte y me gusta que el ´meme´ tenga que ver con el significado del cuadro”, agregó.
Con el tiempo hizo más, y a su público le encantó. “Al ver este tipo de imágenes de los cuadros más famosos, que de por sí te sacan el aliento, pero bosterizados, la gente enloqueció”, contó el publicista. Y aclaró que también lo siguen hinchas de otros equipos, que se sacan la camiseta para disfrutar lo que tiene para ofrecer.
También lo siguen hinchas de otros equipos, que se sacan la camiseta para disfrutar lo que Acanfora tiene para ofrecer.
Esa locura llega a posters, tortas, fundas de celular, fondos de pantalla y demás elementos donde los fanáticos ubican las obras bosteras. Incluso hay personas que conocen clásicas obras de arte gracias a los Bocart, y le mandan fotos en museos mostrando la obra original junto a su versión bostera.
Los trabajos le llevan mucho tiempo, una semana en promedio. Los hace por la noche, cuando termina su jornada laboral. Además, Bruno es un perfeccionista: se toma el tiempo para pensar cómo mejorarlos o qué nuevos detalles y chistes puede agregar en el lienzo digital.
André Henri Dargelas, Le Tour Du Monde Bostero.
Los detalles de estas obras son quizás el principal atractivo, al punto que Bruno empezó a publicar recortes del cuadro junto con la imagen completa para que no pasen desapercibidos. “Es mucho trabajo y una lástima que no se vean –explicó–. Uno se emociona cuando está la posibilidad de agregar cosas y me da mucho orgullo no repetir casi nunca”.
Sueña con organizar una exposición de sus intervenciones, conocer a sus seguidores cara a cara y cantar con ellos alguna canción de la 12.
Más allá del trabajo que le significa, la mayor retribución es que sus producciones se distribuyan velozmente y sean disfrutadas. No le pone marca de agua porque sería “arruinarlo”, y dijo que si bien hay personas que no saben quién lo hizo, una vez en la red “ya son de internet”.
Lo que sí le gustaría es emprender un negocio de merchandising, no tanto por una búsqueda económica, sino porque es un reclamo muy común de sus seguidores. También sueña con organizar una exposición de sus intervenciones, conocer a sus seguidores cara a cara y cantar con ellos alguna canción de la 12. Pero para todo eso, necesitaría más tiempo del que tiene disponible.
Su trabajo como publicista
El publicista no puede vivir de hacer memes (por ahora), porque su vida no pasa solo por el mundillo virtual y el fanatismo por Boca. Su trabajo le dio la posibilidad de trabajar junto a personalidades del deporte -principalmente el fútbol- con los que jamás hubiera soñado, y de hacer comerciales memorables.
Empezó a trabajar en publicidad a los 20 años, y en ese primer empleo conoció a Ariel Abramovici, con quien conforma una dupla creativa desde entonces. Trabajan siempre juntos: donde va uno, va el otro. Son dos personas, pero “una sola unidad de trabajo”.
El primer comercial que hicieron, para CTI móvil en 2006, fue un éxito: “Por todos los que no llegamos”, una publicidad de ambiente mundialista donde hombres comunes con pocas habilidades futbolísticas le piden a la Selección Argentina que ganen por ellos. También son responsables de “Cocacolero”, comercial que compara la carrera de un vendedor de gaseosa con la de un futbolista, que empieza en Chaco For Ever y llega a Europa.
Tuvo la “bendición” de trabajar cuatro años seguidos haciendo campañas con Messi: “Es toda una experiencia”, dijo.
También idearon juntos la publicidad de los argentinos que van a Lesotho para “argentinizar” a los locales del pequeño país que queda dentro de Sudáfrica, para el Mundial 2010. “Fuimos allá, tres días en Sudáfrica y dos en Lesotho”, contó.
E hicieron una donde dos jugadores amateur tienen nombres más grandilocuentes que sus características: Mago y Hacha. “Fue uno de los más populares: iba a jugar al fútbol con amigos y escuchaba que otros se decían ‘Mago’ o ‘Hacha’. Esas cosas te dan mucha más felicidad que cualquier premio”, afirmó.
Sandro Botticelli, Retrato de hombre con escudo de Boca.
Desde que llegaron a Los Ángeles empezaron a trabajar con Gatorade, marca con una importante presencia en el mundo del deporte, particularmente en el fútbol. En este ámbito, los publicistas tuvieron la “bendición” de trabajar cuatro años seguidos haciendo campañas con Lio Messi: “Es toda una experiencia. Es como se lo ve en la tele, muy respetuoso, muy profesional”.
Algo que le llamó la atención de Messi fue al momento de hacer la toma de una jugada de partido -para la cual se practica un día antes con extras. Al mejor jugador del mundo solo le tomó un intento hacerlo a la perfección: “Vino y dijo ‘ok, entendí’, y lo hizo de una. Le pone mucha onda, y cuando tuvo que actuar, lo hizo bien”. Acanfora también trabajó junto a figuras como Alexis Sánchez, Thierry Henry, Luis Suárez y Marco Materazzi, entre otros.
De esta manera, el publicista encontró un punto medio entre su empleo y otros aspectos que lo atraen y hacen quien es, como el fútbol y las redes sociales. “Me gusta mucho mi trabajo y creo que la publicidad está muy relacionada con la cultura. Tienen que ir de la mano”, cerró.
La entrada Esto es “Bocart”: Bruno Acanfora, la mente detrás de los memes y obras de arte “bosterizados” se publicó primero en Diario Con Vos.