escucharescucharEl bonaerense Fernando Martínez, único campeón mundial del boxeo argentino, no disimula su asombro al describir el paisaje que lo rodea en Kendall, en el sudeste de Miami, con viviendas bajas y techo a dos aguas surcadas por una vegetación maravillosa, tal si fuesen postales de “películas” en las cuales la tranquilidad fagocita a la imponencia. Así, con una calma totalmente ajena a la adrenalina que atrapa a los atletas en la previa a una gran competencia, aguarda al filipino Jade Bornea, a una semana de su segunda defensa del título mundial Supermosca (FIB) que se llevará a cabo el próximo sábado en Minneapolis, Minnesota.El “Pumita” Martínez, de 31 años y un récord legítimo de 25 victorias (10 K.O.) y 6 reveses, acompañado por su entrenador Rodrigo Calabrese y su asesor Roberto “Pileta” Gómez, aguarda el arribo de Marcos “Chino” Maidana que oficiará como su principal representante ante los organizadores de esta reunión: TGB Promotions y Warrior Boxing. Se debieron pulir muchas asperezas y desprolijidades tras la subasta reglamentaria que determinó un gran desinterés por este cotejo. Tom Brown –uno de los promotores– ganó la licitación con una cifra muy baja que determinaba sólo 16.250 dólares para el argentino como paga. Luego, entre discusiones, reclamos legales y pugilísticos, se elevaron las cifras sin conocerse el monto final del acuerdo. De todo esto se desprende una reflexión: ¿con qué tipo de protección llegará Martínez al match?Fernando Martínez junto a Calabrese y un momento de reposo mientras espera su peleaGentileza Fernando Martínez PrensaLa preparación se lleva a cabo en el gimnasio del entrenador cubano “Moro” Fernández, en donde intercalaron tareas con el notable Guillermo Rigondeaux, coleccionista de medallas olímpicas y coronas mundiales. Al respecto y tras ser consultado por LA NACION, el técnico Calabrese nos dijo: “Hacemos guantes en modo fuerte dos veces a la semana. Y los más rendidores han sido con el nicaragüense Melvin López, primera serie mundial. Trabajamos con cubanos –amateurs y profesionales– pero con otra intensidad. Ningún sparring nos pidió dinero por sus servicios. Todos consideraron la situación económica de la Argentina. Aquí por ejemplo cada turno de cámara hiperbárica –habitáculo que potencia el rendimiento– nos cuesta 750 dólares. También, el venezolano Jorge Linares, excampeón mundial, nos ofreció su nuevo gimnasio para trabajar allí. Todo ha sido cortesía. Excepto los asiáticos; ninguno quiso “sparrear” con Fernandito por una cuestión de solidaridad con Bornea y lo entendimos”.Martínez, que realizará la segunda defensa del cetro ganado y retenido ante el filipino Jerwin Ancajas, en febrero y agosto de 2022, compartirá esta velada con otros dos cotejos internacionales. El dominicano Carlos Adames expondrá el mundial mediano interino (CMB) ante el estadounidense Julián Williams. En tanto, los norteamericanos Erickson Lubín y Luis Arías, dirimirán en medianos jr, sin cetros en juego. Paradójicamente, la pelea entre “Martínez vs. Bornea”, la más importante y atractiva, es la que menor promoción ha tenido.El Pumita Martínez y su pose característicaGentileza Fernando Martínez prensaLa gran experiencia en este oficio lo lleva a Martínez a estar tranquilo en su otra pelea: la lucha con la balanza. Mas allá del paso del tiempo, se mantiene disciplinado para poder pesar los 52.163 kg, de la categoría que acopió campeones nacionales como Gustavo Ballas, Santos Laciar, Carlos Salazar, Víctor Godoy y Omar Narváez.Ahora cambió de hábitos; dejó los conventillos de La Boca y los gimnasios de Barracas por la imponente naturaleza y los pantanos de la Florida. Y esto lo hace sentir cada vez más importante y responsable. Asume la presión de ser el único campeón mundial que mantiene el pugilismo argentino y, por eso, cada una de sus peleas vale doble. Así de claro y así de contundente.Osvaldo PrincipiTemasBoxeo InternacionalFernando MartínezConforme a los criterios deConocé The Trust ProjectOtras noticias de Boxeo Internacional”Cuando te subes a la balsa…” Atreverse al exilio: Hernández y Cruz, una apuesta por el amor por la vida y el boxeoBrutal. El nocaut de Nakatani ante Moloney que recordó al de Maravilla MartínezNoche caliente. Haney y Lomachenko sobre el ring, con sus padres en los rincones y la insólita agresión en el pesaje