De regreso en Madrid tras disfrutar de unos días de descanso y desconexión entre Jaén y Granada, Sofía Suescun y Kiko Jiménez han reaccionado a la entrevista que Maite Galdeano dará mañana en ‘¡De Viernes!’ organizando una barbacoa con amigos -entre los que se encuentran algunos de los compañeros de la influencer en ‘Supervivientes All Stars’, como Bosco Martínez-Bordiú y Abraham García- en su casa, algo que su madre le tenía “prohibido” como ha reconocido ella misma.
La reportera de ‘Vamos a ver’ ha querido contribuir a esta fiesta llevando a la pareja melón, sandía y piñas. Y a pesar de que en los últimos días se han mostrado de lo más esquivos ante las cámaras, Kiko no ha dudado en agradecer el detalle saliendo a la puerta de la vivienda de su novia a coger la fruta y, de paso, revelar cómo se encuentran ante la inminente reaparición de Maite en un plató.
“Sofía está bien, dentro de lo que cabe hay que levantar cabeza y seguir haciendo vida normal. Y por supuesto yo apoyándola” ha desvelado, confirmando que la barbacoa con amigos es una manera para “continuar con nuestra vida” al margen de lo que su ‘suegra’ pueda decir sobre él en ‘¡De Viernes!’.
Y es que aunque no quiere hablar de Maite, Kiko sí ha confirmado que ambos verán la entrevista, estarán muy atentos a lo que cuente sobre su relación y él responderá el sábado en ‘Fiesta’ tras su sonada ausencia la semana pasada: “Me desahogaré en mi puesto de trabajo porque tengo un compromiso con la audiencia, con mi programa, y este finde estaré ahí si no sucede ningún percance. Responderé a todo porque yo no me callo nada, pero lo trataré con respeto porque es un tema muy delicado” ha asegurado.
Pero sí ha lanzado un mensaje a la madre de Sofía, dejando claro que “tiene que continuar con su vida y hacer vida normal, no se va a quedar en la cama llorando”.
Mientras tanto, ha sucedido algo definitivo esta mañana que marca un punto y final entre madre e hija. Y es que como han contado en ‘Vamos a ver’ un amigo de Maite ha ido hasta la casa de Sofía con una furgoneta para recoger las últimas pertenencias de la de Pamplona, y ahora mismo ya no quedaría nada suyo en la casa de la influencer.