Tel Aviv está bombardeando objetivos en muchas partes del Líbano, atacando a milicianos de alto rango en Beirut y aparentemente escondiendo bombas en bípers y walkie-talkies. El grupo político-paramilitar está lanzando cohetes y drones al norte de Israel, incendiando edificios y automóviles.Pero tanto israelíes como la milicia no usan, aún, la palabra “mágica”.