El secretario del Departamento de Estado estadounidense, Marco Rubio, ha alabado a las políticas de Canadá para combatir las “prácticas económicas coercitivas e injustas” de China, tras un encuentro en Washington con su homóloga del país vecino, Mélanie Joly, en la que ambos parecen haber escenificado cierta normalidad de las relaciones pese a las amenazas comerciales lanzadas por el nuevo inquilino de la Casa Blanca, Donald Trump.Durante la reunión, el jefe de la diplomacia estadounidense “ha elogiado a Canadá por hacer frente a las prácticas económicas coercitivas e injustas de la República Popular China”, ha señalado su portavoz, Tammy Bruce, en un comunicado.El encuentro tenía por objetivo abordar formas de “colaboración” entre los dos países para hacer frente a “desafíos globales compartidos, como fronteras seguras y seguridad energética”.También han conversado sobre “cómo estamos trabajando juntos para abordar cuestiones geopolíticas clave, incluida la crisis en Oriente Medio, Ucrania y Haití”, ha señalado por su parte la ministra de Exteriores canadiense, Mélanie Joly.”Canadá y Estados Unidos son más fuertes cuando trabajan juntos como socios y vecinos”, ha destacado en su cuenta de la red social X.Estas palabras parecen quedar lejos de las polémicas palabras de Trump a su regreso a la Casa Blanca. El republicano ha provocado un terremoto político en Canadá, país vecino al que ha amenazado con imponer aranceles comerciales y donde las discrepancias sobre cómo hacer frente al nuevo liderazgo en Washington ha provocado también la caída del gobierno central de Justin Trudeau, a quien Trump y sus acólitos catalogan como el “gobernador del estado 51” de Estados Unidos.