El Banco Central de Libia ha anunciado este lunes de madrugada la vuelta a la normalidad tras la crisis desatada por el nombramiento de un nuevo gobernador, Abdelfatá Abdelgafar, que se produjo tras la suspensión de su predecesor después del secuestro y posterior liberación del jefe de sistemas informáticos del banco.
“En primer lugar y ante todo, nos gustaría asegurar a todas las partes interesadas que el Banco Central de Libia ha vuelto a su estado funcionamiento como de costumbre y que todos los sistemas han sido restaurados de forma segura y sus operaciones se han reanudado a plena capacidad”, reza un comunicado de la entidad publicado en su cuenta de la red social Facebook.
Así, ha resaltado que Abdelgafar y su equipo han logrado restablecer “con éxito” todos los aspectos de las operaciones del Banco Central, con el que se han comprometido a cumplir con las normas de nueva gobernanza, transparencia e integridad profesional.
De igual forma ha enfatizado su compromiso con el cumplimiento con sus obligaciones pasadas, presentes y futuras después de que el anterior director “huyera del país e impusiera un cierre de todo el sistema y dejara a millones de libios sin acceso a sus cuentas bancarias, salarios, importaciones de alimentos, importaciones médicas y sin la capacidad de gestionar las reservas de divisas entre otros salvavidas nacionales”.
Además, ha reafirmado sus esfuerzos para mantenerse neutral políticamente, para mantener los “más altos niveles de gestión contra la delincuencia financiera” y para “seguir mejorando” su marco de gestión de riesgos.
“El Banco Central de Libia se mantendrá en estrecho contacto con todas las contrapartes nacionales e internacionales, fomentará firmemente dichas relaciones y alentará la cooperación multilateral. Reconocemos que formamos parte de la comunidad mundial y tenemos la intención de contribuir positivamente a este ecosistema”, concluye el comunicado.