Muerte en el cuartel. Imputaron a nueve oficiales del Ejército por la “fiesta de bautismo fatal”

CÓRDOBA.- La Justicia levantó el secreto de sumario en la causa de la muerte del subteniente Matías Chirino tras una “fiesta de bautismo” en una dependencia del Ejército en Corrientes. El fiscal federal interino, Aníbal Martínez, imputó a nueve oficiales por homicidio simple y el juez federal de Paso de los Libres, Gustavo Fresneda, ordenó una segunda autopsia y el secuestro de los teléfonos celulares de los sospechosos, entre otras medidas.Para el fiscal Martínez, los sucesos se encuadrarían en el delito de homicidio simple en perjuicio de Matías Ezequiel Chirino y de abuso de autoridad en perjuicio de Jorge Chaile y Rufino Meza.La imputación alcanzó a Facundo Acosta, subteniente del Ejército, de 27 años; Claudio Luna, con el rango de capitán, de 35; Rubén Darío Ruiz, de 35 y también capitán; Hugo Reclus Martínez Tárraga, de 34 años y apitán, y Darío Martínez, 31 y teniente primero; Exequiel Aguilar, 32 años y teniente; Franco Grupico, de 26 y teniente; Gerardo Bautista, 31 años y subteniente, y Claudia Cayata, de 33 y subteniente del Ejército.Hace dos semanas se habían incorporado al expediente dos declaraciones testimoniales consideradas “clave” por los abogados de la familia de la víctima. Se trata del testimonio de dos subtenientes, Meza y Chaile, que, al igual que Chirino, ingresaban en el Grupo de Artillería de Monte 3 de Paso de los Libres, donde ocurrieron los hechos.Grupo de Artillería de Monte 3, de Paso de los Libres, del Ejército ArgentinoAmbos se consideraron “víctimas” y afirmaron que también “pudieron haber terminado como Chirino”. Declararon ante el fiscal Martínez durante unas siete horas. Fue el tiempo que les tomó describir los “abusos” a los que fueron sometidos. Ezequiel Chirino, padre del joven fallecido, siguió la audiencia de a través de una videollamada.Hoy, en la plaza principal de Holmberg (cerca de Río Cuarto), donde nació Chirino, sus familiares organizan una marcha pidiendo justicia.“Matías podría haber sido un hijo, un amigo, un sobrino de cualquiera”, dijo Luciana Rodríguez, prima de Chirino. Y agregó: “Lo que pasó es una injusticia enorme. Matías era alegría pura y siempre fue una persona supersimpática, de no tener problemas con nadie. Con una sonrisa él siempre decía que había que vivir la vida; no puedo creer lo que pasó, me parece una mentira”.La acusaciónSegún el expediente, el Ministerio Público Fiscal describió que el subteniente Acosta instruyó a Chirino para que llegara a la Unidad el 18 de junio pasado, cuando se debía presentar dos días después, para celebrar lo que denominaron como “bienvenida, bautismo y/o ritual de iniciación”.Le indicó que “debía invitar una cena tanto a él como sus camaradas. Lo maltrató al ordenarle que ingiriera bebidas alcohólicas y que se sumergiera en la pileta con agua sucia y a bajas temperatura, para, finalmente, cuando perdió el conocimiento, dejarlo en un colchón colocado sobre el suelo de la habitación, destapado y sin ningún medio de calefacción”.Ese mismo planteo corrió para Bautista, quien“además de dar órdenes arbitrarias, no se opuso a los maltratos que le dispensaron los demás oficiales a Chirino”.De la subteniente Cayata, el fiscal dijo que no se opuso a “los maltratos” y no objetó que lo dejaran descompuesto en la habitación [a Chirino].A Grupico le endilgó haber impartido “la orden que se cocine los fideos hervidos, que luego los oficiales le ordenaron a Chirino que comiera con la mano” para después dejarlo en el colchón sin conocimiento.Aguilar, además, le ordenó a Chirino que “se dirigiera a comprarle cigarrillos, y finalmente lo dejó” abandonado.Martínez le dio la orden al cordobés de que “comprara las bebidas alcohólicas y cigarrillo, maltratándolo al ordenarle que consumiera bebidas alcohólicas, que se tirara a la pileta y que hiciera flexiones y corriera cuando se equivocaba en el canto”.Luna fue el creador “del grupo de Whatsapp donde se gestó y organizó el evento donde se impartieron las órdenes arbitrarias” y también maltrató a Chirino ordenándole que ingeniera bebidas alcohólicas, “máxime cuando durante el evento habría expresado que se iban a desquitar con el joven porque había tomado de menos. También ordenó que dejaran los teléfonos sobre la mesa de los oficiales, manifestando que los dejen ahí porque los subtenientes ‘cuentan todo’”. Tampoco intentó hacer nada cuando el muchacho se descompuso, según la imputación.Martínez Tarraga “le habría ordenado que fueran a comprar otras bebidas al referirle que habían comprado una bebida de negro [sic] que ‘ni cuando era pobre tomaba esa clase de marca´”. También, según el fiscal, lo dejó abandonado descompuesto.Y Ruiz fue “quien le ordenó beber whisky mientras comía fideos con la mano”.Cómo sucedióEl fiscal, en su dictamen, sostuvo que los hechos sucedieron en el Casino de Oficiales del Grupo de Artillería de Monte 3 el 19 de junio pasado entre las 0.30 y las 06.30, cuando la enfermera sargento Clara Margarita Fernández “notó que el occiso se hallaba inconsciente sin presentar signos vitales y lo trasladó al hospital San José”, La muerte de Chirino se constató cerca de las 7.“El fallecimiento tiene relación de causalidad con los maltratos que aquellos le dispensaron prevaleciéndose de la autoridad que tenían sobre Chirino, como también sobre los subtenientes Rufino Meza y Chaile, en el marco de la reunión denominada ‘bienvenida, ritual y/o bautismo de iniciación’”, definió el representante del Ministerio Público.El fiscal subrayó que una vez que los nuevos subtenientes “perdieron el conocimiento, los abandonaron a su suerte en una de las habitaciones, más precisamente, la que previamente se le había asignado a Chaile, donde colocaron otros dos colchones sobre el piso, donde acostaron a Meza y Chirino sin cubrirlos con alguna frazada o elemento similar para resguardarlo de las bajas temperaturas reinantes”.A las 6.09, la enfermera Fernández recibió una llamada telefónica del teniente Grupico “solicitando que concurra a la Unidad para asistir a uno de los nuevos oficiales ‘que se había pasado de alcohol’, por lo que el subteniente Bautista, la pasó a buscar a su domicilio a las 6.18 y tras ingresar a la habitación, alrededor de las 6:30 observó a los tres subtenientes Chirino, Meza y Chaile, preguntando al teniente Grupico a quién debía asistir y cómo se llamaba”.Era Chirino, quien estaba “acostado sobre su lateral derecho, en un colchón sobre el piso, ubicado en el medio de la habitación. En ese momento se percata que estaba vomitado ya que observó manchas en sus prendas de vestir y en el colchón”.La enfermera le tomó “los signos vitales” y procedió “a liberar los restos de fluidos. Luego intentó liberar la vía aérea y ahí constata que no tiene signos vitales, que no había pulsaciones, que no había respuesta motora, que estaba inconsciente”.Empezó a realizarle reanimación, mientas le solicitó al teniente Grupito que llamen a la ambulancia del cuartel y al 107 para avisar que tenían un paciente sin signos vitales.La segunda autopsia ordena por la Justicia se hará Instituto Forense de Córdoba y la familia de la víctima está representado por el perito Martín Subirash.Gabriela Origlia TemasCorrientesEjército ArgentinoActualidadConforme a los criterios deConocé The Trust ProjectOtras noticias de CorrientesTragedia en la ruta provincial 19. Murió una intendenta correntina tras volcar su vehículoRecorridos. 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